sábado, 6 de junio de 2009

ESTADOS UNIDOS MODERA EL RITMO DE DESTRUCCIÓN DE PUESTOS DE TRABAJO


La tasa de paro sigue siendo la más alta?de los últimos 25 años y supera ya el 9%

Los datos del paro de mayo hechos públicos ayer por el Departamento de Trabajo estadounidense sitúan la tasa de desempleo en el 9,4%, lo que supone la cifra más alta de los últimos 25 años y que en el país hay ya catorce millones y medio de personas sin trabajo. A pesar de ello, el número de despidos ha resultado inferior a lo pronosticado por los analistas, con lo que se acrecienta la impresión de que el fin de la crisis está cerca. Además, mayo se ha convertido en el cuarto mes consecutivo en el que disminuye el número ciudadanos que se suman a las cifras del paro. Y los expertos creen que esa tendencia continuará en los próximos meses.

En términos absolutos, en mayo se esfumaron 345.000 empleos. En cada uno de los tres primeros meses de este año se habían perdido 700.000 puestos y en abril esa cifra fue de 504.000. A pesar de ello, los economistas estadounidenses anuncian que la tasa de paro superará el 10% probablemente a finales de este año o principios del próximo.

Malas noticias

Desde diciembre del 2007, seis millones de personas han visto desaparecer sus empleos. Y aunque todo apunta a que continuará la reducción, hay algunos factores que se traducirán en malas noticias en un futuro inmediato. Entre ellos, la bancarrota del gigante de la automoción General Motors, que ya ha avisado de que tiene previsto prescindir de 20.000 de sus trabajadores. Y a ello habrá que sumar la pérdida de puestos de trabajo indirectos asociados al fabricante de coches.? Tampoco se espera una recuperación inmediata del sector inmobiliario. A pesar de que en algunos estados se da por hecho que la crisis en este capítulo ya ha tocado fondo, la construcción aún no ha comenzado a recuperarse. Tanto es así que 59.000 de los empleos eliminados en mayo pertenecen a esta actividad. Sin embargo, aunque mala, la cifra es mucho mejor que la de abril, cuando 105.000 trabajadores del ramo tuvieron que dejar sus puestos de trabajo.

En la industria, de la que proceden la mayoría de los desempleados del mes pasado, la pérdida fue de 156.000 puestos de trabajo.

Lo que esconde la estadística

Y eso es solo lo que reflejan las cifras registradas. Pero detrás de ellas hay otras que no aparecen en las estadísticas. Por ejemplo, aquellos parados que después de llevar mucho tiempo desempleados han desistido de su búsqueda. O los que han aceptado un trabajo a tiempo parcial. Si se suman esas personas a las de las listas oficiales, la tasa de paro alcanza un escalofriante 16,4%.

Además del evidente drama que esta situación representa para quienes la padecen, tiene también repercusiones graves en la economía general del país. Y es que si los trabajadores pierden su empleo o incluso si temen perderlo, disminuyen su consumo y no hay que olvidar que el gasto de los hogares representa el 70% de la actividad económica de EE.?UU. Y todos los expertos, con Ben Bernanke, el presidente de la Reserva Federal, a la cabeza, opinan que el paro seguirá aumentando en Estados Unidos incluso cuando la crisis económica haya acabado y comience la recuperación. En los últimos días se han sucedido las declaraciones de las autoridades económicas estadounidenses que auguran una larga espera antes de que la situación del empleo vuelva a estabilizarse.

EL SEXO DE LOS CLÉRIGOS


TOMÁS ELOY MARTÍNEZ

Ya casi no hay memoria de los tiempos en que la Iglesia Católica sufrió desafíos tan ásperos como los de estos últimos años. Lo que sucede no tiene la profundidad del cisma litúrgico del obispo Marcel Lefebvre ni el fervor revisionista en la interpretación de los Evangelios que desembocó en la Teología de la Liberación, sino las violaciones a una obligación que no es materia de dogma pero sí de continua perturbación: el sexo de los clérigos.

Primero fueron los delitos de pedofilia que en diciembre de 2002 provocaron la renuncia del cardenal de Boston Bernard Law, de quien se sospechó ocultamiento; 450 demandas millonarias por décadas de abusos contra menores dejaron la archidiócesis al borde de la quiebra.

Otra vez ahora el escándalo se desata cuando sale a la luz algo que se trataba de ocultar: la descendencia del ex obispo paraguayo Fernando Lugo, ahora presidente del Paraguay. El obispo de Ciudad del Este, en Alto Paraná, (Paraguay), Rogelio Livieres, dijo que sus pares conocían la información sobre Lugo desde hace tiempo. “No sé por qué se enmascaran los temas de Iglesia y no se ventilan. En nuestra época (…) todo se descubre”, afirmó Livieres. Y encontró una instantánea refutación oficial: “El Consejo Episcopal Permanente lamenta y rechaza las expresiones de monseñor Livieres, quien hace entender que hubo encubrimiento y complicidad de los obispos del Paraguay sobre la conducta moral del entonces miembro del colegiado episcopal monseñor Fernando Lugo”.

Las palabras de Livieres recuerdan a las que el argentino monseñor Jerónimo Podestá, impulsor del Movimiento Latinoamericano de Sacerdotes Casados, escribió en 1990 al entonces presidente del Episcopado Argentino, cardenal Raúl Primatesta: “Veo con pena que en general tengan ustedes una visión bastante alienada y timorata: no saben lo que piensa y siente la gente en el mundo de hoy. La Iglesia es el Pueblo de Dios y ustedes lo saben, pero en el fondo siguen pensando que la Iglesia son ustedes”. Cuando era obispo de Avellaneda en la provincia de Buenos Aires, Argentina, a fines de los 60, Podestá fue una pesadilla para la dictadura del general Juan Carlos Onganía. Reunía a multitudes de hasta un millón de personas para ceremonias religiosas que se transformaban en espontáneas manifestaciones políticas. Para el régimen fue un alivio que anunciara en 1967 la decisión de casarse.

Podestá llamó varias veces a las puertas del Vaticano sin lograr que Pablo VI le levantara la suspensión a divinis. Insistía en recordar que, si bien Jesús optó por el celibato, no lo impuso a sus apóstoles, entre los que había casados y solteros. El ex obispo de Avellaneda predicaba que el celibato es un don, no un mandato divino, y que nada impide sentir la vocación sacerdotal si se está privado de esa gracia. La mayoría de los católicos ignora que los sacerdotes no tenían prohibido el matrimonio durante los primeros 10 siglos de vida cristiana. Además de San Pedro, otros seis papas vivieron en matrimonio y -más llamativo aún- 11 papas fueron hijos de otros papas o miembros de la Iglesia.

En 1073, Gregorio VII impuso el celibato. Uno de sus teólogos, Pedro Damián, dictaminó que el matrimonio de los sacerdotes era herético, porque los distraía del servicio al Señor y contrariaba el ejemplo de Cristo. Si bien la intención del Papa era restaurar la derruida moral del clero y purificar a la feligresía con ejemplos de castidad, decenas de historiadores suponen que la decisión de imponer el celibato fue también un medio para evitar que los bienes de los sacerdotes casados fueran heredados por sus hijos y viudas y no por la Iglesia. En 1123, el Concilio de Letrán decretó la invalidez del matrimonio de los clérigos.

¿Cuál es el sentido de reprimir las expresiones de la sexualidad, no sólo entre los clérigos sino también en la vida diaria? ¿Qué gana la fe católica con eso?

Se teme que el placer distraiga de la oración, de la relación con Dios, pero el menosprecio de la mujer en los seminarios y la contradicción de los impulsos naturales del hombre en realidad no fortalecen los vínculos entre la Iglesia y el pueblo de Dios. Al contrario, el celibato obligatorio suele desanimar algunas vocaciones y provocar defecciones en el clero.

Si bien creía que “la vigente ley del sagrado celibato” debía seguir “unida firmemente al ministerio eclesiástico”, Pablo VI, atento a los clamores de modernización del Concilio Vaticano II, analizó las objeciones en la encíclica Sacerdotalis caelibatus, de 1967. Allí se preguntó: “¿No será ya llegado el momento de abolir el vínculo que en la Iglesia une el sacerdocio con el celibato? ¿No podría ser facultativa esta difícil observancia? ¿No saldría favorecido el ministerio sacerdotal si se facilitara la aproximación ecuménica?”.

Acaso a Dios lo tengan sin cuidado los deslices del ex obispo Lugo, porque su gloria está más allá de lo que establecen los seres humanos. Pero la inflexibilidad de la doctrina deja entre los católicos la pregunta sobre el sentido de normas creadas por la Iglesia hace 10 siglos, que no existían antes y no tendrían por qué existir para siempre. Jesús predicó la humildad, el amor a Dios y a los semejantes. Sus lecciones de vida siguen siendo claras. A veces, en el afán por interpretarlas, los seres humanos las oscurecen.

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SE REVELAN SOSPECHAS SOBRE LA POSIBLE CONSTRUCCIÓN DE UN REACTOR NUCLEAR EN SIRIA


El OIEA denunció en Viena la falta de cooperación de Siria para determinar el origen de un complejo militar bombardeado por Israel en septiembre de 2007 y dice haber encontrado nuevas partículas de uranio no declaradas en una instalación nuclear en Damasco.

En una inspección rutinaria de un pequeño reactor de neutrones en la capital siria, los expertos de la agencia nuclear de la ONU hallaron partículas similares de uranio artificial a las encontradas en la instalación bombardeada de Al Kibar, aunque el OIEA todavía no puede confirmar si están relacionadas.

Las autoridades sirias aseguran que las partículas encontradas en Al Kibar tienen su origen en las bombas usadas por la aviación israelí en su ataque, algo que el OIEA considera "poco probable".

Estados Unidos e Israel aseguran que Al Kibar iba a ser un complejo nuclear, construido con la ayuda de técnicos norcoreanos.

Por otra parte, los expertos del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) critican a Siria por no ofrecer la cooperación y la transparencia necesaria en la investigación de este asunto.

"La información ofrecida por Siria (al OIEA) hasta ahora no le da al OIEA la capacidad para determinar la naturaleza de la instalación (bombardeada)", escriben los inspectores en su informe, al que tuvo acceso Efe en Viena.

"Para poder completar el análisis de la agencia, Siria debe cooperar más y ser más transparente", concluye el director general del OIEA, Mohamed El Baradei, en el documento.

El responsable máximo del organismo insta además a Siria a entregar lo antes posibles más información y documentación, así como acceso a otros lugares supuestamente relacionados con Al Kibar para tomar muestras medioambientales de equipos y desechos.

En las muestras tomadas por los inspectores del OIEA en el norte de Siria en junio del año pasado se detectaron también restos de grafito, un material usado en reactores nucleares, y Siria ha reconocido -según el informe presentado que ha comprado o al menos encargado "grandes cantidades".

Ese indicio, junto al hecho de que los inspectores encontraron restos de acero no oxidable, alimentan las sospechas de que Siria pretendía construir un reactor nuclear. EFE y fuentes propias.

viernes, 5 de junio de 2009

TASA DE DESEMPLEO EN CANADÁ SE SITUÓ EN MAYO EN SU NIVEL MÁS BAJO EN 11 AÑOS


La tasa de desempleo de la economía canadiense se situó en mayo en el 8,4 por ciento, su nivel más alto en 11 años, tras la pérdida de 42.000 puestos de trabajo durante el pasado mes, dijo hoy el organismo público Estadísticas Canadá (EC).

EC dijo que desde que el número de empleos alcanzó su punto más alto en octubre del 2008, el país ha perdido 363.000 puestos de trabajo, un 2,1 por ciento.

En abril, la tasa de paro se había situado en el 8 por ciento.

Las pérdidas son peores a las esperadas por los analistas y se unen a la rápida apreciación del dólar canadiense.

El temor de los economistas es que las exportaciones canadienses, que dependen en gran medida del mercado estadounidense, sufran en los próximos meses el encarecimiento de la moneda lo que se traducirá en más pérdidas laborales para el sector manufacturero.

Precisamente ayer, el Banco de Canadá advirtió que la apreciación del dólar canadiense amenaza el progreso realizado en los pasados meses después de fuertes inversiones en paquetes de estímulo y la bajada a niveles históricos de las tasas de interés.

Ontario, el corazón industrial del país, fue la provincia que más sufrió las malas noticias laborales.

La provincia, donde se encuentran todas las plantas de montaje de automóviles del país, perdió 60.000 puestos de trabajo en mayo. Desde octubre, la provincia ha perdido 234.000 empleos, un 3,5 por ciento.

EC dijo que aunque Ontario cuenta con el 39 por ciento de la población del país en edad laboral, las pérdidas de empleos en el territorio fueron el 64 por ciento de la destrucción laboral del conjunto del país.

Añadió que en mayo existían 778.000 trabajadores en el sector manufacturero de Ontario, el nivel más bajo desde que el dato se empezó a recoger en 1976.

Los sectores manufacturero y de la construcción son los más afectados por los números negativos. Desde octubre, el empleo en el primero ha caído un 14 por ciento mientras que en la construcción las pérdidas han representado un 9,3 por ciento.

En el conjunto del país, el sector manufacturero perdió 58.000 puestos de trabajo en mayo. Desde octubre del 2008 las pérdidas han sido de 186.000 empleos, un 9,4 por ciento.

jueves, 4 de junio de 2009

EVANGÉLICOS DE ESTADOS HUNDIDOS PESIMISTAS SOBRE EL CRISTIANISMO EN AMÉRICA DEL NORTE


Una encuesta de algunos de las máximos líderes evangélicos en la nación encontró que mientras hay un optimismo abrumador en el crecimiento del Cristianismo en el mundo, hay mayormente pesimismo en lo que se refiere al futuro de la fe en América del Norte.

"Los líderes evangélicos son muy optimistas en el crecimiento futuro del cristianismo, excepto en América del Norte," dijo Leith Anderson, presidente de la Asociación Nacional de los 30 millones de miembros Evangélicos (A.N.M.E).
En la última Encuesta Evangélica de Líderes, realizada el Martes, los encuestados dijeron abrumadoramente (94 por ciento) que creen que el número de cristianos en todo el mundo aumentará en los siguientes diez años. Un mero cuatro por ciento de encuestados dijo que el número de cristianos permanecerá igual, mientras dos por ciento dijo que están dudosos.

Nadie predijo que el número de cristianos decrecerá.

Las expectativas para el crecimiento del Cristianismo, sin embargo, se enfocaron en el sur global donde la religión actualmente florece.

Gary Benedict, presidente de la Alianza Cristiana y Misionera con sede en Colorado Springs, Colo., predijo un "incremento en Sudamérica, África y Asia" pero continuaría disminuyendo en América del Norte y Europa," Reportó ANME.

Cuando vino a los Estados Unidos, la mayor parte de los encuestados evangélicos de Estados Unidos dijeron que creen que el número de cristianos permanecerá igual en el mejor de los casos, pero más probablemente disminuirá. Sin embargo, expresaron esperanza por un despertar espiritual nacional incitada por las dificultades económicas actuales y las incertidumbres políticas.

El presidente ANME además observó que mientras los encuestados son optimistas acerca del número de cristianos en los siguientes diez años, mantuvieron expectativas más confidenciales en la influencia de la religión. Anderson dijo que muchos de los líderes creen que si bien habrá más cristianos, el grupo tendrá menos influencia por la secularización, mahometismo y persecución.

La influencia del Cristianismo en América se ve que ya está en decadencia como lo revelan los cristianos mismos, los cuales muestran confusión con respecto a su fe.
El año pasado, un estudio principal en la religión en América descubrió que la mayor parte de los Cristianos Americanos creen que hay más que una forma para la vida eterna. Aun 57 asistentes evangélicos a la iglesia dijeron que creen que muchas religiones pueden conducir a la vida eterna, según la encuesta bajo la dirección del Pew Forum sobre la Religión y la Vida Pública.

Los líderes cristianos americanos, en respuesta al informe, manifestaron que los resultados de la encuesta son preocupantes y son una indicación de una crisis teologal entre la población cristiana del país así como también el pluralismo creciente en América.

"Ellos (los resultados de la encuesta) representan en el mejor de los casos un malentendido del Evangelio y en el peor de los casos una repudiación del Evangelio," comentó a Dr. R. Albert Mohler, Jr., presidente del Seminario Conciliar Bautista Sureño.

Los resultados de encuesta NAE se basan de una encuesta mensual de 100 miembros de la Junta Directiva del grupo. Incluyen cabezas de 60 denominaciones y los ejecutivos de organizaciones evangélicas incluyendo misiones, universidades, editores publicistas e iglesias. La encuesta cuestiona a los líderes sobre los acontecimientos del día y los asuntos de interés para calibrar la respuesta evangélica en un tema particular. Las encuestas pasadas habían incluido temas sobre Americanos musulmanes, mega iglesias, y política.

Michelle A. Vu

El Reportero Cristiano

EL VATICANO CONCEDE MÁS FACILIDADES A LOS CURAS PARA COLGAR LA SOTANA


¡Gracias Papacito Benedicto, pues ya no dábamos más!…¡por fin tendremos nuestras “noches buenas” sin estar pecando…! Asociación de Curas casamenteros (ACC).

Hasta ahora era un auténtico calvario. Cuando un sacerdote quería colgar la sotana y casarse, tenía que iniciar un procedimiento largo y, a veces, doloroso y lleno de trabas. Benedicto XVI quiere que las secularizaciones o reducciones al estado laical de los curas sean más ágiles y menos farragosas. Incluso se podrán arbitrar automáticamente, cuando el presbítero haya abandonado su ministerio por un período de cinco años o cuando sea culpable de conductas escandalosas.

Para dar más facilidades a los curas que quieran colgar los hábitos, el Vaticano va a conceder más poderes a la Congregación del Clero, que dirige el cardenal brasileño Claudio Hummes. Fue precisamente el purpurado latinoamericano el que dio a conocer la puesta en marcha de este nuevo procedimiento en una carta a todos los obispos del mundo fechada el pasado día 18 de abril.

En ella, el prefecto vaticano explica que las nuevas normas se ponen en marcha, tras su aprobación papal, porque “en numerosos casos, el derecho canónico no parece el procedimiento más adecuado para solucionar los nuevos problemas que se presentan”.

En concreto, a partir de ahora, los obispos podrán solicitar la secularización de sus curas que se nieguen a hacerlo o de los que cuelguen la sotana durante un período de cinco años, que automáticamente quedarán reducidos al estado laical. Y lo mismo les ocurrirá a los que den muestras de una conducta escandalosa.

Casos de abusos sexuales

En este apartado, Roma no incluye, sin embargo, los casos de abusos sexuales del clero, que seguirán centralizados, como hasta ahora, en manos de la Congregación para la Doctrina de la Fe.

La nueva normativa vendrá a oficializar el caso de muchos sacerdotes que se secularizan de hecho, pero no piden permiso a sus obispos y, menos, a Roma. Como reconoce el cardenal Hummes, “algunos sacerdotes abandonan su ministerios, se casan civilmente y tienen hijos sin avisar a sus respectivos obispos”.

A partir de ahora, “si dicho sacerdote no normaliza su situación, el bien de la Iglesia y el del mismo presbítero exigen que sea reducido al estado laical, para que pueda regularizar su situación, sobre todo de cara a sus hijos”. Porque, como señala Hummes, los hijos de los curas “tienen derecho a tener un padre con una situación regularizada ante Dios y ante su propia conciencia”.

Y concluye el cardenal de la Curia romana: “Ayudarles a eso es una de las razones de estos nuevos procedimientos”, que otorgan a los obispos el derecho y el deber de tomar la iniciativa.

Según el Vaticano, no hay estadísticas sobre el número de sacerdotes que abandonan el ministerio sin pedir la secularización. Aunque las cifras oficiales no se conocen, se calcula que hay en todo el mundo unos 100.000 sacerdotes que tuvieron que colgar la sotana para poder casarse. En España, unos 10.000.

Ante la sequía vocacional que sufre, muchos se preguntan por qué se empeña la Iglesia católica en seguir manteniendo el celibato obligatorio. Unos dicen que proporciona al clero una mayor libertad y disponibilidad. Otros creen que se trata de una simple cuestión económica: es más fácil de alimentar y manejar un ejército de 400.000 curas célibes.

En cualquier caso, aunque teóricamente se muestra inflexible, la Jerarquía de la Iglesia suele hacer la vista gorda. En África y en Latinoamérica, muchos curas viven con sus mujeres en las casas parroquiales. Cuando los casos son demasiado evidentes, Roma interviene. Recientemente, dos obispos de la República Centroafricana tuvieron que presentar su renuncia por tener mujer e hijos.

La propia Iglesia Católica acepta una serie de excepciones a su propia regla. Por ejemplo, con los curas casados anglicanos que se pasan a la Iglesia católica y siguen ejerciendo. En tiempos del régimen comunista, en Checoslovaquia se ordenaron curas y obispos casados. Pero tras la caída del telón de acero, la Iglesia los ocultó. Por miedo al “efecto contagio”. Y por supuesto, hay curas católicos casados que siguen ejerciendo el ministerio, pero no de rito latino.

lunes, 1 de junio de 2009

PADRE ALBERTO CUTIÉ ABANDONA IGLESIA CATÓLICA Y SE CONVIERTE EN EPISCOPAL


El sacerdote Alberto Cutié después del escandalo en el que se vio envuelto al ser fotografiado en en la playa con una mujer y que le costó el puesto, decidió abandonar la Iglesia Católica y “convertirse en miembro de la iglesia Episcopal donde continuará su sacerdocio”, informó este jueves esta entidad. La iglesia Episcopal es una de las ramas de la Iglesia anglicana considerada protestante.

El famoso sacerdote católico de Miami, que desató un escándalo cuando apareció en una revista de farándula besándose y acariciándose en una playa, continuará su vida religiosa en una iglesia que no lo obliga al celibato.

Alberto Cutié decidió abandonar la Iglesia Católica y “convertirse en miembro de la

iglesia Episcopal donde continuará su sacerdocio”, informó este jueves esta entidad.
El padre Alberto, de 40 años, uno de los sacerdotes hispanos más famosos de Estados Unidos, con programas en la televisión y gran presencia en los medios, quedó en el centro de un escándalo a principios de mayo por la aparición de fotos suyas en una revista de farándula en las que se lo ve en poses románticas y besando en la boca a una mujer en una playa de Miami Beach.

El sacerdote, fuerte crítico del celibato dentro de la Iglesia, reconoció desde un primer momento sus escapadas amorosas y había sido “licenciado” temporalmente por el arzobispado de Miami de la parroquia que dirigía en Miami Beach.

El escándalo, reflejado en medios internacionales y en Estados Unidos, volvió a instalar en la opinión pública estadounidense el debate sobre los supuestos problemas que genera el celibato en la Iglesia católica.

Desde el 2002, la Iglesia estadounidense se ha visto salpicada de miles de denuncias de abusos sexuales de menores por parte de sacerdotes católicos.

Carta del Sacerdote Alberto Cutié

Queridos amigos:

El libro de los Salmos nos dice: “Muéstrame tus caminos, Señor, enséñame tus sendas”. Estas palabras de las Sagradas Escrituras me han acompañado durante mucho tiempo. La vida de los que tienen fe es una búsqueda constante de la voluntad de Dios -siempre estamos buscando el camino de Dios para nosotros-. Hoy, ante esta comunidad que he tenido el placer de servir y a la cual quiero con todo mi corazón, les anuncio que yo deseo seguir proclamando el amor de Dios y viviendo la invitación que Dios me hizo para ser sacerdote. Ahora, más que nunca en mi vida, estoy seguro que Dios es amor y que Él es el origen de todo amor.

Les quiero asegurar que esta lucha no comenzó hace unas pocas semanas atrás. Durante mucho tiempo he luchado, buscado en el interior de mi corazón y mi alma, la guía de Dios en todo lo que afecta mi vida. He hablado con amigos dentro y fuera de la Iglesia Episcopal sobre su servicio a Dios y sobre las similitudes que existen en todas las ramas del cristianismo, incluyendo aquellas que profesan la fe católica y apostólica. He visto con mis propios ojos cuántos hermanos míos sirven a Dios como hombres casados y con la bendición de tener sus propias familias. También debo reconocer que he luchado espiritualmente e ideológicamente cuando veo que ciertos miembros del pueblo de Dios se sienten excluidos de poder vivir una vida sacramental plena.

Los que me conocen, saben muy bien que no sería capaz de lastimar a nadie deliberadamente -especialmente a mi familia, amigos y a la comunidad de fe-. También quiero aclarar que mi lucha personal no debe, de manera alguna, manchar el compromiso de tantos hermanos sacerdotes que viven a plenitud su compromiso célibe y son fieles a esa promesa. Siempre amaré la Iglesia Católica Apostólica y Romana; a todos sus miembros que están comprometidos con su fe y que han enriquecido mi vida de tantas maneras. Siempre los llevaré en mi corazón.

Hoy he decidido unirme a una nueva familia espiritual dentro de la gran sombrilla del cristianismo, pero nunca abandonaré mi servicio a Dios. Siempre he tratado, a través de mi trabajo en los medios de comunicación, de promover la unidad entre todos los creyentes y creo que nuestra misión sigue siendo que todos puedan llegar a conocer a un Dios de amor, un Dios bueno, El único que es constante en medio de un mundo que siempre está cambiando.

En estos momentos les pido a todos que por favor respeten mi privacidad y la privacidad de todos mis seres queridos. En los últimos días se han propagado tantas mentiras, sugerencias malignas, rumores e incluso acciones muy lastimosas por parte de quienes buscan sacar dinero y quieren aprovecharse para lucrar en esta etapa de transición en mi vida. Respetuosamente les pido a todos que por favor paren ya. Ya es suficiente.

Al comenzar esta nueva etapa en nuestras vidas, les pido que nos traten con la consideración y el respeto que se merece todo ser humano. Humildemente quiero agradecer a tantas personas a nivel internacional y en nuestra comunidad, especialmente nuestra familia y amistades, que nos han ofrecido amor y apoyo incondicional.

Gracias y solo deseo que Dios los bendiga a todos.

Rev. Padre Alberto Cutié

DE ACUERDO CON LA BIBLIA, ¿QUÉ OCURRE CUANDO EL HOMBRE MUERE?


por David Macías Isaza
davidmaciasisaza@gmail.com


Introducción:

La muerte es quizá uno de los temas más recurrentes en la literatura, el arte y en las conversaciones de los pensadores de todas las épocas, también es una de las ideas que mas producen incógnitas, misterio, miedo y terror. Las personas evitamos hablar de ello en general, sobre todo cuando se trata de nuestra propia muerte, y si somos de verdad honestos, a la gran mayoría de personas nos es muy difícil enfrentarnos con la realidad inminente de que vamos a morir algún día. Creo que se puede afirmar que todos los niños llegan en un momento a preguntar a sus padres la razón por la que tenemos que morir, y si no lo hacen a sus padres, seguro que se plantean ésta pregunta en el momento en que comienzan a tener conciencia de ella. Aunque existen muchas respuestas diferentes en cuanto al tema y además muchas creencias, en éste estudio nos ocuparemos de ver que nos dicen las escrituras judeo–cristianas, es decir, que dice la Biblia al respecto.

¿Por qué existe la muerte?

La Biblia ofrece una respuesta muy concreta en cuanto al tema de la muerte, en romanos 5:12 leemos:

Por tanto, de la manera que el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, y la muerte así pasó a todos los hombres en aquel en quien todos pecaron.

Para el pensamiento hebreo y cristiano, la muerte fue la consecuencia del pecado del hombre. El primer hombre pecó y heredó a su descendencia la tendencia al pecado y también la muerte inminente, de esto deducimos que Dios no hizo al hombre inmortal, pero tampoco lo hizo para la muerte, podríamos afirmar que lo hizo con la capacidad de elegir su propio camino, es decir, lo hizo con libre albedrío y le dejó ambas opciones abiertas a su decisión. Dios le dijo al primer hombre:

Y mandó el SEÑOR Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto comerás; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal, no comerás de él; porque el día que de él comieres, morirás.
(Génesis 2:16-17)

Dios le dio el mandamiento al hombre de no comer de éste fruto pues moriría, pero el hombre decidió comer, puesto que vio que su mujer había comido… pero la mujer comió porque fue engañada:

¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto? Y la mujer respondió á la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto comemos; Mas del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, porque no muráis. Entonces la serpiente dijo á la mujer: No moriréis; Mas sabe Dios que el día que comiereis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como dioses sabiendo el bien y el mal. (Génesis 3:1-5)

La serpiente mintió a la mujer diciéndole que no moriría, sino que se haría mas sabia y serían como dioses. Cabe decir que el libro de Apocalipsis nos revela que ésta serpiente antigua es también llamada diablo o Satanás:

Y prendió al dragón, aquella serpiente antigua, que es el Diablo y Satanás, y lo ató por mil años; (Apocalipsis 20:2)

Cabe también decir que el Mesías declaró que el diablo es mentiroso y padre de mentira y que no hay verdad en él:

"Ustedes son de vuestro padre, el diablo, y los deseos de vuestro padre quieren hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira." (Juan 8:44)

Así que el maligno ha introducido en la humanidad la mentira de que no morimos, de que somos como dioses porque conocemos el bien y el mal. Pero según la Biblia, la única forma de ser inmortales sería comiendo del árbol de la vida que se encuentra en el paraíso o jardín de Edén, pero Dios expulsó al hombre, su mujer y al diablo de allí:

dijo el SEÑOR Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, para que no meta su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre. Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una llama de cuchillo que andaba en derredor para guardar el camino del árbol de la vida. (Génesis 3:22,24)

Aquí vale decir que Dios promete darle a comer del fruto de la vida eterna a todo el que guarde sus mandamientos y sus obras hasta el fin:

El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias: Al que venciere, daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del Paraíso de Dios. (Apocalipsis 2:7)

Ésta promesa de Apocalipsis, se hará realidad cuando la tierra vuelva a ser el paraíso, ya que Dios ha prometido que así será:

Ciertamente consolará el SEÑOR a Sion, consolará todas sus soledades, y tornará su desierto como paraíso, y su soledad como huerto del SEÑOR; se hallará en ella alegría y gozo, confesión y voz de cantar. (Isaías 51:3)

Dios ha prometido restaurar la tierra al estado perfecto en que estaba antes de la caída del hombre. Cuando el hombre comió del fruto del bien y el mal, fue condenado a la muerte y la tierra fue maldita, porque el diablo también fue expulsado del edén y comenzó a hacerle guerra a Dios, influenciando a los hombres para rebelarse contra su creador. Ante la realidad inminente de nuestra muerte y descomposición, el diablo ha seguido sembrando su mentira, que aparece con diferentes formas: dice que el alma es inmortal o que después de la muerte sigue la reencarnación, ya que no puede negar que morimos, pues es algo evidente e innegable, el maligno ha inventado que seguimos vivos como espíritus, es decir, como fantasmas, como si fuéramos dioses (Es la misma mentira que dijo a la mujer en Génesis). Vemos que Jesucristo declara que Dios es un Espíritu:

Dios es Espíritu; y los que le adoran, en Espíritu y en verdad es necesario que adoren (Juan 4:24)

Dios es Espíritu pero los hombres no. Los hombres somos de carne y hueso, pero para Dios somos hechos de la misma materia que fue hecha esta tierra, es decir, para Dios somos de tierra, de polvo:

Formó, pues, YHWH Dios al hombre del polvo de la tierra, y alentó en su nariz soplo de vida; y fue el hombre en alma viviente. (Génesis 2:7)

Vivimos porque Dios nos dio aliento de vida y al morir, éste aliento de vida vuelve a Dios, pero nosotros no somos ése aliento de vida, sino que somos almas vivientes por causa de ese hálito de vida en nosotros, si somos perspicaces notaremos que la Biblia no nos enseña que tengamos alma, sino que somos almas. Por esto Dios le dio esta sentencia al primer hombre cuando comió del fruto que no debía comer:

Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste á la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo, No comerás de él; maldita será la tierra por amor de ti; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida; Espinos y cardos te producirá, y comerás hierba del campo; En el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas á la tierra; porque de ella fuiste tomado: pues polvo eres, y al polvo serás tornado. (Génesis 3:17-19)

Ésta declaración del Dios Eterno nos muestra que los hombres somos de polvo y al morir, volvemos a convertirnos en polvo, dejamos de existir como hombres, para existir como polvo. En ese momento muere nuestra alma, pues nuestra alma es nuestra propia vida humana.

Todas las escrituras hebreas concuerdan con La declaración de Dios en el Génesis

Como hemos visto, para Dios somos polvo y al morir volvemos al polvo y dejamos de ser, ésta misma idea se puede ver en todos los libros hebreos, por ejemplo:

Porque los que viven saben que han de morir: mas los muertos nada saben, ni tienen más paga; porque su memoria es puesta en olvido. También su amor, y su odio y su envidia, feneció ya: ni tiene ya más parte en el siglo, en todo lo que se hace debajo del sol. (Eclesiastés 9:5-6)

Se dice que éste escrito hebreo fue hecho por el ungido rey salomón a quien Dios dotó con sabiduría divina y a quien Dios prometió que sería como un hijo para Él, ciertamente éste escrito refleja que la creencia hebrea es que el hombre muere y vuelve al polvo tal como hemos visto que Dios dice en el Génesis.

Todo lo que te viniere á la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el sepulcro, adonde tú vas, no hay obra, ni industria, ni ciencia, ni sabiduría. (Eclesiastés 9:10)

Éste pasaje muestra que los muertos van al sepulcro, donde no hay nada que hacer ni mas vida, tampoco se emprende nada. Los profetas no nos hablan de transmigración del alma o reencarnación.

Y el polvo se torne á la tierra, como era, y el espíritu se vuelva á Dios que lo dió. (Eclesiastés 12:7)

En éste pasaje vemos que el aliento de vida, es también llamado Espíritu. Éste espíritu nos infunde vida, pero no somos ése espíritu, somos almas vivientes por causa de ese Espíritu en nosotros.

Los cielos son los cielos de YHWH: Y ha dado la tierra á los hijos de los hombres. No alabarán los muertos á JAH, Ni cuantos descienden al silencio. (Salmos 115:16-17)

En éste pasaje de los salmos, vemos que el pensamiento hebreo sigue siendo el mismo, los muertos no alaban a Dios sino que descienden al silencio de la tumba, además vemos que los cielos son de Dios, pero que la tierra es para los hombres. También los llamados profetas mayores concuerdan con éste mismo pensar:

Porque el sepulcro no te celebrará, ni te alabará la muerte; Ni los que descienden al hoyo esperarán tu verdad. El que vive, el que vive, éste te confesará, como yo hoy: El padre hará notoria tu verdad á los hijos. (Isaías 38:18-19)

Vemos pues que en el pensamiento hebreo, los muertos no saben nada ni pueden hacer nada y además vemos que la tierra es la verdadera herencia que Dios promete para los hombres fieles, los hebreos no esperaban ir al cielo al morir, ni tampoco pensaban que al morir el hombre seguía vivo en estado etéreo en el más allá, sino que su esperanza estaba puesta en la resurrección de entre los muertos, esperanza que fue anunciada por los profetas y después confirmada por el Mesías y por los apóstoles como veremos a continuación.

¿Pero por que morimos?

Porque Dios decidió que su Espíritu no se quedaría en los seres humanos por siempre, puesto que los hombres se volvieron muy carnales:

Entonces el SEÑOR dijo: Mi Espíritu no se quedará para siempre con los hombres, porque ciertamente ellos son carnales. Serán, pues, sus días ciento veinte años. (Génesis 6:3)

Vemos pues que Dios ha tenido que decidir acortar los días del hombre a causa del pecado, pero en su eterno amor y misericordia nos promete una redención, una oportunidad de vivir por siempre en esta tierra, de conocerlo después de resucitar de entre los muertos.

La promesa de la tierra y la resurrección

Antes que el hombre desobedeciera a Dios, estaba lleno del espíritu de Dios y estaba unido a Dios. Cuando el hombre pecó, Dios tuvo que abandonarlo, ya que Dios es un espíritu santo, por ésto la muerte entró en el hombre y en el mundo y con ella el sufrimiento y la maldad. En ese momento el hombre se separó de Dios y sintió miedo, luego tuvo que comenzar a invocarlo. Dios prometió al hombre que restauraría la tierra que fue maldita por el pecado, le prometió a la mujer que su descendencia aplastaría la cabeza de la serpiente, pero de los dos primeros hijos que tuvieron, el injusto asesinó al justo y luego Dios les permitió tener otro hijo justo que invocaba a Dios llamado Set y de ésta descendencia de Set Dios guardó un linaje de hombres Justos que le creyeron, a quienes les confirmó su promesa de restaurar la tierra y volverla de nuevo un paraíso (mirar Genesis 3 y 4). De ésta descendencia nació Noé el justo y mas tarde Abraham, a quien Dios le comunicó que un descendiente de suyo sería el heredero del mundo y también le comunicó que resucitarían los creyentes para vivir en la tierra restaurada, éste período de tiempo ha sido llamado con muchos nombres, los mas comunes son: “la era venidera”, “el reino de los cielos” o “el reino de Dios”, será un período de justicia y paz, será de nuevo “el paraíso en la tierra”. El pueblo hebreo ha creído siempre en la resurrección y en el reino venidero como se puede ver en las páginas de la Biblia:

Porque los malignos serán talados, Mas los que esperan en YHWH, ellos heredarán la tierra. Pues de aquí á poco no será el malo: Y contemplarás sobre su lugar, y no aparecerá. Pero los mansos heredarán la tierra, Y se recrearán con abundancia de paz. (Salmos 37:9-11)

En este pasaje el rey David, quien era también un ungido de Dios y profeta, vislumbra que los mansos y los que esperan con paciencia heredarán la tierra y tendrán paz. Esto es inquietante si tenemos en cuenta el hecho inminente de que moriremos, pues ¿cómo puede un muerto heredar la tierra? Es obvio que ésta promesa solo podría ser cumplida si Dios resucita a los muertos, y esto precisamente es lo que nos promete la Biblia:

Bienaventurados los mansos: porque ellos recibirán la tierra por heredad. (Mateo 5:5)

Aquí el Mesías está confirmando la misma promesa que dio el salmista David. ¿Como podrían los hombres heredar la tierra si van a morir, o si al morir siguen vivos como fantasmas y van al cielo?
ciertamente Dios vive en el cielo y no ha prometido a los hombres el cielo sino la tierra:

Los cielos son los cielos de YHWH: Y ha dado la tierra á los hijos de los hombres. No alabarán los muertos á JAH, Ni cuantos descienden al silencio. (Salmos 115:16-17)

Una persona muerta no puede alabar a Dios, sino que está sumida en el silencio de la tumba. La resurrección es la verdadera esperanza bíblica, como lo expresa el Mesías Jesús de Nazareth:

la voluntad del Padre, que me envió, es que no pierda yo nada de todo lo que él me da, sino que lo resucite en el día final. Y esta es la voluntad del que me ha enviado: que todo aquel que ve al Hijo y cree en él tenga vida eterna; y yo lo resucitaré en el día final (Juan 6:38-40)

La promesa de la vida eterna significa ser resucitado en el futuro por el hijo de Dios en el día final, para disfrutar del paraíso o tierra restaurada, en la era venidera o reino de los cielos, por esto la oración de Jesucristo dice:

Venga tu reino, que se haga tu voluntad en la tierra como en el cielo (Mateo 6:10)

Los apóstoles también veían esto así:

Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; pues que los tiempos del refrigerio de la presencia del Señor son venidos; el cual os ha enviado a Jesús el Cristo, que os fue antes anunciado; al cual de cierto es necesario que el cielo tenga hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, del cual habló Dios por boca de todos sus profetas que han sido desde el siglo. (Hechos 3:19-21)

Existe un tiempo llamado el tiempo de restauración de todas las cosas y todos los profetas hablaron de ése tiempo maravilloso, ese tiempo es el mismo llamado “reino de Dios” del que estamos hablando. Pero para poder participar de ése tiempo los creyentes de otros tiempos tendrán que ser resucitados. Por esto el profeta Daniel declara:

Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua. (Daniel 12:2)

El profeta Daniel concuerda perfectamente con el pensamiento hebreo: los muertos duermen en el polvo de la tierra, han vuelto al polvo, han dejado de existir:

Y tú irás al fin, y reposarás, y te levantarás en tu suerte ( o en tu herencia ) al fin de los días. (Daniel 12:13)

Hemos visto que Jesús el Mesías prometió exactamente lo mismo, que quien creyera en él, sería resucitado el día final:

Y esta es la voluntad del que me ha enviado: que todo aquel que ve al Hijo y cree en él tenga vida eterna; y yo lo resucitaré en el día final (Juan 6:40)

Claro que para poder resucitar los muertos, Dios tiene que tenerlos en mente, es decir, para Dios (quien ve todo o que no es como si ya fuera) por esto Jesús declara también en otra ocasión:

Allí será el llanto y el crujir de dientes, cuando viereis a Abraham, y a Isaac, y a Jacob, y a todos los profetas en el Reino de Dios, y vosotros ser echados fuera. (Lucas 13:28)

Aquí Jesús les estaba diciendo a los fariseos que cuando viniera el reino de Dios serían resucitados Abraham, Isaac, Jacob y los profetas pero que ellos serían echados fuera por su incredulidad. También en otra oportunidad Jesús reprende a los saduceos, quienes fueron una secta judía de los tiempos de Jesucristo, quienes influenciados por el pensamiento pagano, no creían en la resurrección, sino que creían que al morir, viajaban inmediatamente como espíritus a recibir un premio o un castigo:

Pero que los muertos resucitan, incluso lo mostró Moisés en la zarza, cuando llamó al Señor `El Dios de Abraham, Isaac y Jacob. Porque Él no es Dios de los muertos, sino de los vivos, pues todos están vivos para Él.» (Lucas 20:37-38)

Nótese que es en la mente y en la omnisciencia de Dios es donde todos sus fieles viven, como lo explica el Mesías en éste pasaje. Así para el pensamiento bíblico, la resurrección aún no ha ocurrido, sino que ocurrirá el día final, o el día que regrese el Mesías de los cielos. El único que ha resucitado es precisamente Jesucristo como lo reportan el apóstol Pedro en éste pasaje de Hechos 2, versículos 23 al 36:

Desde el principio, Dios ya había decidido que Jesús sufriera y fuera entregado a sus enemigos. Ustedes lo ataron y lo entregaron a los romanos para que lo mataran. ¡Pero Dios hizo que Jesús volviera a vivir! ¡Y es que la muerte no tenía ningún poder sobre él!

Nótese que el apóstol explica que Dios resucitó al Mesías, y sigue:

Hace mucho tiempo el rey David dijo lo siguiente, refiriéndose a Jesús:

"Veo siempre a Dios delante de mí; con él a mi derecha no tengo nada qué temer. Por eso estoy contento y canto de alegría. Por eso estoy tranquilo: porque siempre confío en Dios. Dios no me dejará en la tumba; Dios no dejará que me muera, pues soy su fiel servidor. Él me ha enseñado a vivir. Con él a mi lado soy verdaderamente feliz".

Ésta parte es un anuncio profético escrito por el rey David, quien está hablando en nombre del Mesías. Así lo explica el apóstol Pedro lleno del Espíritu Santo:

"Amigos israelitas, hablemos claro. Cuando David murió, fue enterrado, y todos sabemos dónde está su tumba. Y como David era profeta, Dios le prometió que un familiar suyo sería rey de Israel. "David sabía que Dios cumpliría su promesa. Por eso dijo que el Mesías no moriría para siempre, sino que volvería a vivir. Y todos nosotros somos testigos de que Dios resucitó a Jesús, y de que luego lo llevó al cielo y lo sentó a su derecha.

El mismo rey David quien escribió que “Dios no me dejará en la tumba” aún está en la tumba, así que lo que escribió fue un anuncio de cómo sería la resurrección de Jesús el Cristo, sigamos:

"Dios le dio a Jesús el Espíritu Santo. Y ahora Jesús nos ha dado ese mismo Espíritu, pues nos lo había prometido. ¡Y esto es lo que ustedes están viendo y oyendo! "Sabemos que quien subió al cielo no fue David, pues él mismo dice:

"Dios le dijo a mi Señor el Mesías:
'Siéntate a la derecha de mi trono hasta que yo derrote a tus enemigos' ". (Salmos 110)

"Israelitas, ustedes tienen que reconocer, de una vez por todas, que a este mismo Jesús, a quien ustedes mataron en una cruz, Dios le ha dado poder y autoridad sobre toda la humanidad". (hechos 2:23-36)

Éste pasaje, aunque largo, revela la calidad de la predicación de los apóstoles llenos del Espíritu Santo, aquí está particularmente el apóstol Pedro diciéndonos que David murió y su tumba aún está en Israel, pero que él creía en el Mesías y en su resurrección y proféticamente escribió acerca de la resurrección de Jesús.

En otra ocasión Jesús dijo:

Nadie ha ascendido al cielo, excepto aquel que descendió del cielo, el Hijo del Hombre, quien está en el cielo. Así como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así debe ser levantado el Hijo del Hombre, para que cualquiera que crea en Él no perezca, sino que tenga vida eterna. (Juan 3:13-15)

Aquí el Mesías habla proféticamente de lo que el hijo del hombre tenía que cumplir después de resucitar: ser ascendido al cielo, el Mesías habla en un lenguaje profético, puesto que los profetas habían hablado ya de ésta ascensión del Mesías. Por esto dice que el hijo del hombre está en el cielo… pues proféticamente estaba destinado a estar allí. Podemos ver que todos los escritos bíblicos concuerdan y armonizan con lo que estamos viendo, es decir, que los muertos están dormidos y volviéndose polvo, pero que serán resucitados el día final, así también lo expresa el apóstol de los gentiles (no judíos) Saulo de tarso, llamado también Pablo:

Porque el mismo Señor con aclamación, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero: Luego nosotros, los que vivimos, los que quedamos, juntamente con ellos seremos arrebatados en las nubes á recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. (1 Tesalonicenses 4:16-17)

Es necesario aclarar algunos puntos aquí. ¿Quiénes son los muertos en Cristo? Los muertos en Cristo son todos los creyentes de todos los tiempos que creyeron en la venida del Mesías y vivieron una vida de fe… recordemos que Jesús declaró que Abraham, Isaac y Jacob se sentarían en el reino de Dios junto con todos los profetas, y recordemos que el Ángel Miguel le anunció a Daniel que se levantaría al fin de los tiempos a recibir su herencia. En otro pasaje, en la carta a los hebreos esto es expresado así:

"Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba. Por la fe habitó como extranjero en la tierra prometida como en tierra ajena, habitando en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa, porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios. Por la fe también la misma Sara, siendo estéril, recibió fuerza para concebir; y dio a luz aún fuera del tiempo de la edad, porque creyó que era fiel quien lo había prometido. Por lo cual también, de uno, y ese ya casi muerto, salieron como las estrellas del cielo en multitud, como la arena innumerable que está a la orilla del mar. En la fe murieron todos estos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, creyéndolo y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra. Los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria, pues si hubieran estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver. Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos, porque les ha preparado una ciudad" (Heb. 11:8-16).

Éste pasaje revela que los hombres de fe de la antigüedad esperaban la ciudad que viene del cielo, y que murieron sin recibir dicha herencia… ¿cómo pues van a recibirla, a menos que resuciten?

Y yo Juan vi la santa Ciudad, Jerusalén la nueva, que descendía del cielo, aderezada de Dios, como la esposa ataviada para su marido. Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y el mismo Dios será su Dios con ellos. (Apocalipsis 21:2-3)

Éste pasaje de Apocalipsis nos revela que ésa ciudad santa bajará del cielo a la tierra.

¿Y qué más digo? Porque el tiempo me faltará contando de Gedeón, de Barac, de Sansón, de Jefté, de David, de Samuel, y de los profetas, que por fe ganaron reinos, obraron justicia, alcanzaron promesas, taparon las bocas de los leones, apagaron fuegos impetuosos, evitaron filo de cuchillo, convalecieron de enfermedades, fueron hechos fuertes en batallas, trastornaron campos de enemigos extraños; las mujeres recibieron sus muertos por resurrección, unos fueron estirados, menospreciando la vida, para ganar mejor resurrección. (Hebreos 11:32-35)

Aquí el escritor de los hebreos aclara que la esperanza de ellos era la resurrección. y continúa:

Y todos éstos, aprobados por testimonio de la fe, no recibieron la promesa, proveyendo Dios alguna cosa mejor para nosotros, que aquellos no fuesen perfeccionados sin nosotros. (Hebreos 11:39-40)

Todos éstos creyentes de la antigüedad fueron aprobados por su fe, pero no recibieron la herencia. Como hemos visto la herencia es la tierra restaurada (paraíso), o el reino de Dios en la tierra. Ellos no recibieron aún la herencia puesto que Dios quiere que nosotros también alcancemos ésta promesa y nos está llamando a participar de la misma fe en el reino venidero y una conversión de nuestra vida en arrepentimiento para poder ser dignos de la resurrección y el reino. Lamentablemente hoy en día muchos se han desviado de la verdad y predican una esperanza diferente, claro que esto no es nuevo sino que viene desde la mentira que Satanás sembró en la mujer y posiblemente en todos los hombres que no han escuchado a Dios sino al espíritu engañador, llamado también el Dios de éste mundo malo. Las ideas de un alma inmortal y la reencarnación tienen su raíz en el maligno y alejan al hombre de poner su confianza en la verdadera esperanza de la resurrección de entre los muertos. Tristemente hay aún hombres que se empeñan en interpretar las escrituras hebreas desde ése punto de vista pagano, y la verdad es que habría que descartar todo lo que hemos visto hasta ahora para poder encajar dichas creencias en la verdad expresada a lo largo de tantos libros bíblicos que concuerdan y armonizan diciendo exactamente lo mismo. Hay que decir también que de todas las escrituras judeo-cristianas, si existen algunos pocos pasajes que han sido el sustento de muchos estudiosos para defender la idea de que la Biblia presenta evidencia de que existe “vida después de la muerte” en el sentido de que existe “el mas allá” donde viven las almas desencarnadas o los fantasmas, pero la verdad es que éstos pasajes no son totalmente claros en cuanto a esto, como si lo son los pasajes que declaran que el hombre al morir vuelve al polvo. Muchos creyentes podrían decir que estos puntos no son tan relevantes en sí y que Dios no va a juzgarnos por creer lo que queramos creer. Pero la voluntad de Dios es que seamos santos en toda nuestra vida y además que le conozcamos a Él. Si nos empeñamos en seguir con nuestras propias creencias, entonces no estamos realmente conociendo a Dios y tampoco entenderemos nunca sus propósitos. Sería como tener un Dios falso. Nuestras creencias no pueden contradecir las creencias de los profetas, que es la verdad revelada de Dios como estamos viendo, éste punto de vista hebreo concuerda y armoniza en todos los libros bíblicos, y si queremos servir a Dios y llevar el mensaje correcto a la humanidad, nosotros debemos ser coherentes en la interpretación de las escrituras y no solo ver en ellas lo que nos gustaría que dijera, debemos adaptarnos a ellas y no adaptar lo que se nos ha enseñado o lo que creemos, forzando unos cuantos versículos para enseñar error. Por esto vamos a desenmascarar de una vez por todas, las falsas enseñanzas que aún hoy se propagan por todas partes, que hombres que no escudriñan con diligencia, repiten como loros lo que ni siquiera entienden.

Algunos pasajes mal interpretados, descontextualizados o mal traducidos

Muchos pasajes de la Biblia se han tomado para probar que los hombres son llevados al cielo o que al morir una parte del hombre sigue viva y conciente, como hemos visto en este estudio, esto no es bíblicamente posible, puesto que tendríamos que desechar declaraciones proféticas muy claras, tendríamos que descontextualizar dichos pasajes de la revelación general que nos presenta la escritura y que concuerdan y armonizan entre sí. Hay otros versículos que crean confusión y contradicciones porque los traductores añaden palabras que no se encuentran en los manuscritos griegos, los traductores hacen esto básicamente porque ya tienen su propia versión de las cosas y simplemente pasan por alto la verdad revelada por Dios y hacen que la Biblia diga lo que a ellos les gustaría que dijera. Cuando miramos diferentes traducciones nos encontramos con inconsistencias muy sutiles pero que presentan debates y problemas teológicos muy serios, miremos algunos ejemplos de pasajes que se usan para fundamentar las creencias ajenas a la Biblia:

El testimonio de Enóc

Y vivió Enoc sesenta y cinco años, y engendró a Matusalén. Y anduvo Enoc con Dios, después que engendró a Matusalén, trescientos años; y engendró hijos e hijas. Y fueron todos los días de Enoc trescientos sesenta y cinco años. Y anduvo Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios (Génesis 5:21-24)

Aún hoy en día se usa ésta forma coloquial para referirse de alguien que ha muerto, se dice que “Dios se lo llevó”. Como hemos visto, en el pensamiento hebreo, un muerto va a la tumba, al polvo. Las personas que piensan que es posible que los hombres sean llevados al cielo, generalmente leen aquí que Enoc fue llevado al cielo, aunque éste texto no dice nada del cielo. En el libro de los hebreos encontramos otra pista que nos puede revelar la verdad detrás de éste misterio:

Por la fe, Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto tuvo testimonio de haber agradado a Dios. (hebreos 11:5)

Muchos traductores de mentalidad contraria a las escrituras leen en estos pasajes que Enoc fue llevado al cielo, por esto es que algunas versiones añaden la palabra cielo en éste versículo, la Biblia católica de las américas lo vierte así:

Por la fe Enoc fue trasladado al cielo para que no viera muerte; Y NO FUE HALLADO PORQUE DIOS LO TRASLADO; porque antes de ser trasladado recibió testimonio de haber agradado a Dios.

Esto es muy interesante, ya que demuestra que los traductores pueden influir mucho, imprimiéndole a un solo versículo lo que a ellos les parece con solo añadir una palabra extra. Al leer la versión católica mas antigua que existe, uno no puede menos que sorprenderse. Ésta es la forma como lo vierte la Vulgata Latina:


Por la fe fue trasladado Enoc de este mundo para que no muriese, y no se le vio más, por cuanto Dios le transportó a otra parte que no se sabe; mas antes de la translación, tuvo el testimonio de haber agradado a Dios. (hebreos 11:5)

A mi personalmente me parece insólito que no concuerden las versiones, incluso cuando ambas son católicas.

¿Cómo pues saber cual versículo es el correcto?

Creo que para hacer honor a la verdad debemos seguir la pista que nos deja el Génesis, pues allí no se nos dice que Enoc fue llevado al cielo, sino que desapareció porque Dios se lo llevó, es decir, que murió. Como Enoc murió “jóven” de acuerdo con la longevidad de su época, se da el testimonio de que agradaba a Dios, así que no murió por desobediente, sino que murió en la voluntad de Dios, esperando la resurrección.

¿Cómo podemos estar seguros de esto?

Pues en el mismo pasaje de Hebreos, el escritor hace una declaración que muy posiblemente los traductores han pasado por alto:

Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido las promesas; sino mirándolas de lejos, y creyéndolas, y saludándolas; y confesando que eran peregrinos y advenedizos sobre la tierra. (Hebreos 11:13)

Después de decir en el versículo 5 que Enoc fue llevado para no ver muerte, en el versículo 13, el mismo escritor de Hebreos nos asegura que murió, puesto que “todos estos” incluye a Enoc. Además ya habíamos visto que el Mesías afirmo:

Nadie ha ascendido al cielo, excepto aquel que descendió del cielo, el Hijo del Hombre, quien está en el cielo. (Juan 3:13)

Con esta declaración del Mesías, queda claro que Enoc no puede estar en el cielo.

¿qué significa entonces que Enoc fue llevado (trasladado) para no ver muerte?

Para responder a ésta interrogante habría que ir también a las palabras de Jesús el Mesías, quien en una ocasión declaró:

Con seguridad les digo, si una persona sigue mi palabra, nunca verá la muerte. (Juan 8:51)

Tenemos ésta declaración que nos da luces para interpretar el pasaje sobre el patriarca Enoc. Aunque Jesús aseguró que quien siguiera su palabra nunca vería la muerte, vemos en las escrituras que todos los apóstoles que lo siguieron murieron, muchos de ellos asesinados. Y están dormidos en el polvo de la tierra, esperando la resurrección. Tenemos la declaración del apóstol Pablo:

Hermanos, no queremos que ignoren lo que va a pasar con los que ya han muerto, para que no se entristezcan como esos otros que no tienen esperanza. ¿Acaso no creemos que Jesús murió y resucitó? Así también Dios resucitará con Jesús a los que han muerto en unión con él. Conforme a lo dicho por el Señor, afirmamos que nosotros, los que estemos vivos y hayamos quedado hasta la venida del Señor, de ninguna manera nos adelantaremos a los que hayan muerto. El Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero. (1 Tesalonicenses 4:13-16)

Éste pasaje del apóstol Pablo basta para mostrar que los que han muerto serán resucitados en la segunda venida del Señor Mesías al mundo. Si Pablo creyera que al morir, seguimos vivos, no habría hablado de la esperanza de la resurrección, sino que les habría escrito a los Tesalonicenses que no se angustiaran por los muertos, pues ellos están en el cielo con el Señor… ¡Pero no! Es claro que Pablo tiene las mismas creencias hebreas en cuanto a la muerte, y es mas que transparente aquí que la verdadera esperanza es la resurrección. Así que cuando Jesús dice que quien guarde su palabra “no verá la muerte” esto quiere decir que no verá la “muerte eterna”, la que la Biblia llama “la segunda muerte” en Apocalipsis 20:6.

Conclusión:

1) Hay creencias ajenas a la revelación bíblica que se han infiltrado en las traducciones a través de traductores descuidados o tercos en cuanto a sus creencias sobre la muerte.
2) El patriarca Enoc murió mucho más temprano que sus contemporáneos pero tuvo una visión del reino y la resurrección y por esto se da testimonio de que agradaba a Dios y fue “transpuesto para no ver muerte”.
3) Nadie ha subido al cielo, sino solo el Mesías. Además el Mesías tuvo que vencer y dar su vida para poderse ganar el lugar a la diestra de Dios.
4) Si nos empeñamos en creer que Enoc no murió y que fue llevado al cielo, se formarían contradicciones doctrinales que desarmonizarían con el mensaje bíblico. La Biblia declara que el pecado entro a todos los hombres y con él la muerte a todos los hombres también. Las escrituras afirman que todos tenemos que morir por causa del pecado:

Por tanto, de la manera que el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, y la muerte así pasó a todos los hombres en aquel en quien todos pecaron. (Romanos 5:12)

5) La doctrina bíblica no puede contradecir las mismas declaraciones de Dios. Nuestra predicación no puede incluir falsas esperanzas, porque está en juego la salvación de los hombres.
6) Es curioso que éste singular pasaje se usa mas que todo en las sectas misteriosas y en la “nueva era” como prueba de las abducciones y mentiras semejantes.


¿Fue el profeta Elías llevado al cielo donde está Dios?

Otro pasaje inquietante en las escrituras es el encontrado en 2 Reyes 2:11:

Y aconteció que, yendo ellos hablando, he aquí, un carro de fuego con caballos de fuego apartó a los dos; y Elías subió al cielo en un torbellino.

Lo que muchos lectores pasan por alto es que la palabra cielo se usa para el firmamento tanto como para el cielo donde habita Dios. Ya hemos visto que el Mesías declaró que nadie ha subido al cielo sino solo “el hijo del hombre” (el Mesías). Así que éste cielo donde fue llevado Elías es “el firmamento”. Otra prueba contundente que muestra la escritura es que Elías no desaparece de escena en éste momento, sino que fue apartado de su sucesor Eliseo, pero el lector constante se percata de que Elías aparece de nuevo más adelante, como consta en el libro de II Crónicas.

El episodio del torbellino y los carros de fuego fue en los tiempos en que reinaba el rey Josafat, descendiente de David, quien después, años mas tarde murió:

Y durmió Josafat con sus padres, y lo sepultaron con sus padres en la ciudad de David. Y reinó en su lugar Joram su hijo (II Crónicas 21:1)

Cuando Joram comenzó a reinar, hizo lo que no agradaba al Señor y el profeta Elías aparece en escena enviándole una carta:

Y le llegaron letras del profeta Elías, que decían así: El SEÑOR, el Dios de David tu padre, ha dicho así: Por cuanto no has andado en los caminos de Josafat tu padre, ni en los caminos de Asa, rey de Judá…(II Crónicas 21:12)

Conclusión:

1) El profeta fue llevado a otro lugar de la tierra, para que Elías lo sucediera en su labor, pero no murió ni fue llevado al cielo de Dios en ése episodio.
2) El profeta Elías tuvo que haber muerto después, como todos los hombres, esperando la resurrección en el día final junto con todos los demás creyentes y con el profeta Daniel, el día que regrese el Mesías a reinar, como estamos viendo en el presente estudio, pues todos los hombres, sin excepción, estamos condenados a morir.

La parábola del rico y Lázaro

La parábola del rico y Lázaro encontrada en Lucas 16:19-31 ha sido también una piedra de tropiezo, y es que si la tomamos literalmente y la vemos aislada del contexto bíblico, podría concluirse que al morir, los hombres son inmediatamente juzgados, recompensados o castigados… pero las parábolas no son para ser tomadas literalmente, sino que son historias hipotéticas de donde se pueden desprender principios para la vida cotidiana y que encierran verdades profundas. La Biblia es clara cuando hace declaraciones acerca del juicio, que vendrá el día que venga el Mesías a reinar, miremos:

Y cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará sobre el trono de su gloria. Y serán reunidas delante de él todas las naciones; y los apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. (Mateo 25:31-32)

Otra declaración del mismo Jesús dice:
Porque el Padre a nadie juzga, mas todo el juicio dio al Hijo. (Juan 5:22)

El apóstol pablo también concuerda con esto en varios versículos:

Requiero yo, pues, delante de Dios, y del Señor Jesús, el Cristo, que ha de juzgar a los vivos y los muertos en su manifestación y en su Reino. (1 Timoteo 4:1)

Para pablo es claro que el juicio será en la manifestación del reino, cuando venga el Mesías, y que éste juicio será hecho por Jesucristo.

Así que la parábola del rico y Lázaro debe ser leída bajo éste punto de vista, y así desaparecen las confusiones que se puedan presentar al respecto:

Había un hombre rico, que se vestía de púrpura y de lino fino, y hacía cada día banquete con esplendidez. Había también un mendigo llamado Lázaro, el cual estaba echado a la puerta de aquel, lleno de llagas, y deseando saciarse de las migajas que caían de la mesa del rico; y aun los perros venían y le lamían las llagas. Y aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico, y fue sepultado. Y en el infierno alzó sus ojos, estando en los tormentos, y vio a Abraham de lejos, y a Lázaro en su seno. (Lucas 16:19-23)

La parte interesante de éste pasaje es ésta que dice que Lázaro fue llevado por los ángeles al seno de Abraham, pues bien, Jesucristo declara que esto será en el día final, cuando los ángeles recogerán a sus elegidos:

Y entonces se mostrará la señal del Hijo del hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del hombre que vendrá sobre las nubes del cielo, con grande poder y gloria. Y enviará sus ángeles con trompeta y gran voz; y juntarán sus escogidos de los cuatro vientos, de un cabo del cielo hasta el otro. (Mateo 24:30-31)

El mensaje bíblico no se contradice, pero cuando pasamos por alto las declaraciones de Jesucristo, se forman inconsistencias. En este pasaje el Mesías habla del tiempo cuando serán recogidos sus elegidos, mas adelante también dice: “Uno será tomado y otro será dejado”, pues bien, la parábola del rico y Lázaro también debe ser vista bajo esta misma lógica que Jesús expone a lo largo de toda su predicación, teniendo en cuenta que en la parábola se puede brincar el tiempo y hablar del futuro como si fuera el pasado, ya que precisamente eso es lo que significa el movimiento parabólico.

La transfiguración

La transfiguración ha causado también gran revuelo puesto que aparecen Moisés y Elías hablando con Jesús, de donde deducen los “lectores ligeros” que Moisés y Elías viven ahora. La clave para entender la transfiguración es tal vez, verla tal como los apóstoles y Jesús mismo la vieron:

Ocurrió como ocho días después de haber dicho esto, que Jesús salió con Pedro, Juan y Santiago, y fue a una montaña a orar. Mientras oraba, la apariencia de su rostro se alteró, y su vestido se hizo blanco y brillante. Dos hombre estaban hablando con Él, ellos eran Moisés y Elías. (Lucas 9:28-30)

La clave para entender éste relato es mirar lo que había dicho Jesús en el versículo 27:

Y os digo en verdad, que hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte, hasta que vean el Reino de Dios.

¡Jesús les había dicho que algunos iban a ver el reino de Dios! y en el monte lo que vieron fue precisamente una visión en éxtasis de lo que será el reino de Dios y la gloria que tendrá el Mesías. Por lo menos así lo explica el mismo apóstol Pedro en una de sus cartas:

Porque nosotros no os hemos dado a conocer la potencia y la venida de nuestro Señor Jesús, el Cristo, siguiendo fábulas por arte compuestas; sino como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad. Porque él había recibido de Dios el Padre honra y gloria, cuando una tal voz fue a él enviada de la magnífica gloria: Este es el amado Hijo mío, en el cual yo me he agradado. Y nosotros oímos esta voz enviada del cielo, cuando estábamos juntamente con él en el Monte Santo. (2 Pedro 1:16-18)

Si leemos todo el capítulo 1 de la carta de Pedro nos damos cuenta que el tema central del que se está hablando es de la segunda venida del Mesías en su reino. Para Pedro la experiencia en el monte servía de prueba de la gloria que tendrá el Mesías en su parousía, además, para Jesucristo la experiencia en el monte había sido una visión, un éxtasis:

Y como descendieron del monte, les mandó Jesús, diciendo: No digáis a nadie la visión, hasta que el Hijo del hombre resucite de los muertos. (Mateo 17:9)

Conclusión:

1) Moisés y Elías están muertos en el polvo de la tierra pero serán resucitados en la segunda venida del Mesías y eso fue precisamente lo que vieron los apóstoles aquí. Por esto Jesús les dijo que “no gustarán la muerte hasta que vean el reino de Dios”. Esto quiere decir que solo después de la experiencia ellos estarían dispuestos a morir por el reino, puesto que lo habían visto en una visión o éxtasis.

El ladrón que fue crucificado con Jesús

Otro texto que ha servido para perpetuar la confusión se encuentra en Lucas 23:42-43:

Y dijo a Jesús: Señor, acuérdate de mí cuando vinieres en tu Reino. Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo, hoy estarás conmigo en el paraíso.

Sobre éste tema en particular se han elaborado innumerables teorías, las más importantes, sin embargo, son dos o tres: Dicen los eruditos bíblicos que aquí la coma está puesta en el lugar incorrecto, es decir, ya que en el griego no hay comas, es decisión de los traductores el lugar donde se coloca la coma y el sentido del texto cambiaría totalmente, miremos: De cierto te digo hoy, estarás conmigo en el paraíso. Vemos que al cambiar la coma de lugar, cambia radicalmente el sentido del texto. Otros comentaristas alegan que ésta forma de hablar de Jesús, no pareciera a su manera cotidiana de expresarse vista en los evangelios sinópticos. Hay otro grupo de creyentes que afirman que éste comentario de Jesús no tiene nada de sobre natural, ya que la palabra paraíso significa literalmente “jardín” y los muertos eran sepultados en jardines, así que Jesús le estaría declarando que estarían juntos en el jardín sepultados. Para hacer honor a la verdad, hay que decir que los evangelios no nos dicen que éste ladrón fue sepultado con Jesús, antes bien, los ladrones y criminales eran echados fuera de la ciudad en un basurero con fuego, llamado gehena. Creo personalmente que para entender bien lo que Jesús quiso decir aquí, muchos estudiantes han seguido la pista equivocada, ya que no toman en cuenta que lo que declaró Jesús, lo hizo como una respuesta a la declaración del ladrón, y ¿qué dijo el ladrón?

“Señor, acuérdate de mí cuando vinieres en tu Reino.”

Pocos se han puesto a meditar bien en ésta declaración de fe tan grande que hizo el ladrón. Tomando en cuenta que hasta los mismos apóstoles de Jesús dudaron de él cuando fueron confundidos por su crucifixión, aunque el maestro les había advertido muchas veces que el hijo del hombre tenía que morir, ellos no lo podían entender:

Y comenzó a enseñarles, que convenía que el Hijo del hombre padeciese mucho, y ser reprobado de los ancianos, y de los príncipes de los sacerdotes, y de los escribas; y ser muerto, y resucitar después de tres días. (Marcos 8:31)

Sí mi amado hermano, nuestro Señor Jesucristo enseñó públicamente que tendría que morir, puesto que estaba escrito en los profetas, que antes de venir a reinar, debía padecer y ser desechado. Pero éste ladrón está le declara la revelación mas grande de todas las que se encuentran en el evangelio, implícitamente está diciéndole a Jesús:

Señor, cuando resucites y vengas en tu reino, acuérdate de mi y resucítame. Es decir, éste hombre estaba haciendo la declaración de fe que el apóstol Pablo dice que salva:

Que si confesares con tu boca al Señor Jesús, y creyeres en tu corazón que Dios le resucitó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, mas con la boca se hace confesión para salvación. (Romanos 10:9-10)

¡Éste ladrón está declarando precisamente que Jesús es el Mesías esperado, el rey de Israel que tiene que morir y que luego resucitará de entre los muertos, ser ascendido al cielo como dijo el profeta Daniel para recibir el reino y luego volver a la tierra a reinar!

Y he aquí, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS. Éste será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y le dará el Señor Dios el trono de David su padre: Y reinará sobre la casa de Jacob por siempre; y de su reino no habrá fin. (Lucas 1:31-33)

"Miraba yo en la visión de la noche, y he aquí con las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre, que vino hasta el Anciano de días, y le hicieron acercarse delante de él. Y le fue dado dominio, gloria y reino, para que todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio es dominio eterno, que nunca pasará, y su reino uno que no será destruido"(Daniel 7,13-14)

Respondió Natanael y le dijo: Rabí, tú eres el Hijo de Dios: Tú eres el Rey de Israel. (Juan 1:49)

Esta declaración de fe que hizo el ladrón es tal vez, la declaración mas grande que hay en la Biblia, y la luz de ésta declaración, la respuesta de Jesús es nítida y diáfana:

“De cierto te digo hoy, estarás conmigo en el paraíso”

Jesús le está respondiendo que por ésa fe que mostró con su declaración, sería resucitado para vivir en la tierra restaurada o paraíso como hemos estado viendo en éste estudio. En el Génesis vemos que Dios tuvo que expulsar al diablo, el hombre y la mujer de el jardín de Edén, y también en el génesis nos dan una descripción muy clara de el lugar donde estaba ubicado el paraíso o jardín de Dios, en una zona que actualmente es desértica porque Dios tuvo que llevarse ése paraíso para el cielo, pues nos dice que puso unos querubines alrededor para que el hombre no pueda entrar:

Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados para guardar el camino del árbol de la vida. (Génesis 3:24)

Luego en Apocalipsis nos dicen que el paraíso bajará a la tierra, aunque también vimos que el Isaías que el desierto se volverá otra vez el paraíso:

Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, que descendía del cielo, de Dios, dispuesta como una novia ataviada para su marido. Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y Él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos, y será su Dios. (Apocalipsis 21:2)

Y me mostró un río puro de agua de vida, límpido como el cristal, que provenía del trono de Dios y del Cordero. En el medio de la calle de ella, y de uno y de otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que lleva doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones. Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán. (Apocalipsis 22:1-3)

Si mi amado lector, la nueva Jerusalén es la ciudad que viene del cielo y es la misma ciudad que esperaban los patriarcas de la antigüedad. Esa ciudad es el paraíso que vendrá del cielo a la tierra puesto que dice que las hojas de los árboles del árbol de la vida son para la sanidad de las naciones. Isaías 35 describe el futuro del desierto que se convierte de nuevo en un jardín de Edén, y eso ocurrirá queridos lectores, cuando el cielo venga a la tierra, cuando se cumpla la oración de Jesucristo: “Venga tu reino para que se haga tu voluntad en la tierra como se hace en el cielo…”

Conclusión:

Jesucristo vio la fe de aquel “ladrón justo” que aún viendo morir al rey, creyó que resucitaría y que vendría a gobernar las naciones de la tierra y a restaurar todo como al principio… Esa declaración de fe fue suficiente para hacerse acreedor a la resurrección de entre los muertos y la vida futura en el reino de Dios, gobernado por el Mesías Jesús de Nazaret.


Filipenses y las creencias de Pablo

Uno de los textos más malinterpretados de todos los que hemos visto hasta ahora es el siguiente:

Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir, un beneficio. Aunque es evidente que si vivo tendré aún oportunidad de seguir trabajando por el evangelio. En realidad no sé qué es preferible, si vivir o morir. Unas veces quisiera vivir, y otras veces no, pues mi verdadero anhelo es irme para estar con Cristo, lo cual es mucho mejor que quedarme aquí. (Filipenses 1:21-23)

Aquí la mayoría de personas leen que Pablo quiere decir que al morir se iría a estar con Cristo. Lo que interpretan es que al morir, uno sigue vivo como un fantasma y se va donde está Cristo… como hemos visto en este estudio, la muerte en el contexto bíblico es inexistencia, inconsciencia. El mismo Pablo dice en Tesalonicenses:

«Hermanos, no queremos que ignoren lo que va a pasar con los que ya han muerto, para que no se entristezcan como esos otros que no tienen esperanza. 14 ¿Acaso no creemos que Jesús murió y resucitó? Así también Dios resucitará con Jesús a los que han muerto en unión con él. 15 Conforme a lo dicho por el Señor, afirmamos que nosotros, los que estemos vivos y hayamos quedado hasta la venida del Señor, de ninguna manera nos adelantaremos a los que hayan muerto. 16 El Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero. 17 Luego los que estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados junto con ellos en las nubes para encontrarnos con el Señor en el aire. Y así estaremos con el Señor para siempre. 18 Por lo tanto, anímense unos a otros con estas palabras.»

Para Pablo, la esperanza era la resurrección en el día final, en la venida del Señor… así que ¿cómo iba a contradecirse? En ninguna parte de la Biblia encontramos a Pablo diciendo que los muertos están con Cristo, sino mas bien dice que estarán, en el futuro reino de Dios, y como hemos visto, esto concuerda con lo que Jesucristo predicó. Así que la frase: “pues mi verdadero anhelo es irme para estar con Cristo, lo cual es mucho mejor que quedarme aquí” Bien podría significar que para Pablo, la muerte es un estado inconsciente, como un sueño donde no hay conciencia de nada, tal como creía Salomón, Isaías, Daniel y todos los escritores bíblicos que anhelan la resurrección y el paraíso en la tierra, antes que anhelar un cielo fuera de este mundo. Pablo era un hebreo y tenía la forma de pensar de los escritores hebreos y los profetas, como hemos visto.

Conclusión final:

Podríamos quedarnos mirando una por una todas las demás malas interpretaciones y malas traducciones hechas por personas que se apegaron a sus creencias antes que rendirlas a la verdad revelada de la palabra de Dios. Espero que este estudio le haga reflexionar sobre que tipo de evangelio está usted creyendo y quiera Dios que le dé curiosidad por leer la Biblia antes que creer a cualquier predicador de mentiras… Como hemos visto, el mensaje bíblico es claro:

-El hombre desobedeció y fue condenado a muerte
-La tierra fue maldita y llena de corrupción
-Dios ideó la redención y la resurrección de entre los muertos para los fieles
-El Mesías esperado vino y enseño sobre el reino de Dios, murió, resucitó y está en el cielo, esperando el día de venir a reinar con poder y vara de hierro.
-Los creyentes en este reino, se bautizan y lo anuncian, Dios les da su Espíritu Santo, los unge.
-Ellos resucitarán cuando venga el Señor a reinar, junto con todos los creyentes de todas las épocas.
-El reino de Dios comenzará con Jesús, pero después Jesús entregará el reino a Dios (1 Corintios 15:24-26)

Hoy en Día se está predicando un mensaje que aparenta ser espiritual pero que es confuso y maligno, se predica que los muertos van al cielo, o que nuestra meta es ganar el cielo. Ésta falsa esperanza no da el fruto correcto, pues es un engaño del diablo, sería como decir que al morir no morimos, lo que es una falsedad, puesto que todos tenemos que morir, ya que está establecido a los hombres, que mueran una vez; y después, el juicio. (Hebreos 9:27) Claro que este juicio no ocurre después del hombre morir, sino como enseña la escritura en la segunda venida del Mesías y al final frente al trono blanco, cuando todos serán juzgados por Dios mismo en persona.

¡Gracia y Bendiciones para Todos!

¿POR QUÉ NO PRESENTÓ PABLO AL DIOS TRINO A LOS ATENIENSES?


Por Ingº Mario A Olcese (Apologista)


Es curioso que el apóstol Pablo desaprovechara una magnífica ocasión de presentar al “Dios Trino Cristiano” a los Griegos cuando estuvo de visita en el Aerópago en Atenas. Esto es, además, sorprendente si consideramos que la Trinidad es la doctrina fundamental y central de Cristianismo ortodoxo. ¿Pero pudo ser realmente posible que el inspirado apóstol de los gentiles se olvidara de una tan crucial doctrina de la Cristiandad como es la Trinidad? ¿No sería posible acaso que la razón para ello sea que Pablo nunca fue un apologista Trinitario como millones de cristianos lo son hoy? Pero veamos la historia completa en Hechos 17:22-31:

“Entonces Pablo, puesto en pie en medio del Areópago, dijo: Varones atenienses, en todo observo que sois muy religiosos; porque pasando y mirando vuestros santuarios, hallé también un altar en el cual estaba esta inscripción: AL DIOS NO CONOCIDO. Al que vosotros adoráis, pues, sin conocerle, es a quien yo os anuncio. El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas, ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación; para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros. Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos. Siendo, pues, linaje de Dios, no debemos pensar que la Divinidad sea semejante a oro, o plata, o piedra, escultura de arte y de imaginación de hombres. Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan; por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos”.


Al terminar de leer los versículos de arriba, no encontramos ni un atisbo de la doctrina de un “Dios Trino” en labios de Pablo. Al contrario, él claramente distingue al Dios Creador de aquel varón que Él mismo designó y levantó de entre los muertos, el cual, obviamente, es Su Hijo Unigénito. Pablo no incluye al Hijo de Dios (que él llama “aquel varón”) dentro de ese Dios desconocido (la Divinidad), y mucho menos, al Espíritu Santo.

Esto realmente no me sorprende para nada, pues a los Corintios también les dijo que para él (y para los demás verdaderos Cristianos) sólo hay un Dios, el Padre; y un Señor, Jesucristo (1 Cor. 8:4-6).


Algunos dirán que Pablo no presentó a un Dios Trino porque lo consideró inoportuno y complicado y seguramente no lo entenderían. Sin embargo, los Griegos no eran ajenos a las Deidades Trinas en su religión. Y por otro lado, cualquier Griego culto sabía perfectamente del pensamiento de Platón en relación con una divinidad Trina, cuatro siglos antes de que Pablo estuviera visitando Atenas.

De acuerdo con el Nouveau Dictionnaire Universel: “La trinidad de Platón, en sí meramente un rearreglo de trinidades más antiguas que se remontan hasta pueblos más primitivos, parece ser la trinidad racional de atributos de índole filosófica que dio origen a las tres hipóstasis o personas divinas respecto de las cuales enseñan las iglesias cristianas.[... ] El concepto que tuvo este filósofo griego [Platón, del siglo IV a. De la E.C. ] de la divina trinidad [... ] puede encontrarse en todas las religiones antiguas [del paganismo]” (París, 1865-1870, edición dirigida por M. Lachâtre, tomo 2, pág. 1467).


Como vemos, los Griegos hubieran aceptado de buena gana la supuesta doctrina Cristiana de la Trinidad de labios de Pablo, ya que fue el mismo filósofo Griego Platón quien había sentado las bases para la doctrina que hoy los Trinitarios defienden celosamente. Por eso me parece doblemente extraño que Pablo no haya dicho ni pío del Dios Trino (Padre, Hijo, Espíritu Santo) a un pueblo ya acostumbrado a escuchar de deidades trinas por todos lados, salvo, claro está, que él no hubiese sido un apologista Trinitario.






LA VERDAD DE LA PANDEMIA